Cada año durante el Año Nuevo, una película especial ocupa un lugar destacado en muchas celebraciones familiares rusas:
"La ironía del destino, o goce de su baño". Este filme, dirigido por Eldar Riazánov y estrenado en 1976, mezcla comedia romántica con una crítica sutil a la uniformidad de la vida soviética, resonando profundamente entre los espectadores rusos hasta la fecha.
La trama gira en torno a Zhenia Lukashin, interpretado por Andréi Miagkov, quien por una serie de confusas circunstancias termina en Leningrado en lugar de su amigo. Allí, en un apartamento idéntico al suyo en Moscú, se encuentra con Nadezhda "Nadia" Sheveleva, desencadenando una serie de eventos llenos de humor y romance.
Además de su atractiva trama, el film es célebre por sus diálogos ingeniosos y citas memorables que han calado en la cultura popular rusa:
- "Надо меньше пить!.. Пить меньше надо!.. Меньше надо пить!" (¡Hay que beber menos!.. Beber, hay que hacerlo menos!.. Menos hay que beber!)
- "Какая же гадость эта ваша заливная рыба!" (¡Qué asco esta gelatina de pescado que tienen!)
- "31 декабря мы с друзьями ходим в баню. Это у нас такая традиция." (El 31 de diciembre vamos a la sauna con amigos. Es una tradición nuestra.)
- "Как я мог, я же никогда не пьянею!" (¡Cómo es posible, si yo nunca me emborracho!)
- "Вы замужем? — Ну, какое это имеет значение? — Значит, не замужем." (¿Estás casada? — Bueno, ¿qué importancia tiene eso? — Así que, no casada.)
- "Вы думаете, я легкомысленная? - Поживем — увидим." (¿Crees que soy frívola? - Viviremos, veremos.)
Estas frases no solo destacan por su humor, sino también por cómo capturan la esencia de las interacciones humanas y la sátira de la vida cotidiana soviética, contribuyendo a que la película se convierta en una obra culturalmente significativa y una tradición festiva.
Desde su primera emisión, "La ironía del destino" ha sido una pieza fundamental de las celebraciones de Año Nuevo en muchos hogares de Rusia y otros países postsoviéticos, similar en popularidad a "Qué bello es vivir" en Estados Unidos durante la Navidad. Se estima que unos 100 millones de personas vieron su estreno, y su popularidad persiste, con millones de personas viéndola religiosamente cada año.
"La ironía del destino, o goce de su baño" se ha convertido en más que una película; es un ritual anual que reúne a familia y amigos, celebrando no solo el inicio de un nuevo año, sino también la rica cultura y tradiciones rusas.