Los apellidos en Rusia empezaron a usarse en el siglo XVI. Esto pasó tanto en las familias ricas como entre los campesinos. Antes de esto, la gente solo usaba un nombre y un patronímico, que es un nombre derivado del nombre de su padre.
Con el tiempo, los apellidos se volvieron importantes para mostrar de dónde venía una persona, su trabajo o su posición social. Así, nacieron muchos de los apellidos rusos que conocemos hoy.
Con los años, estos apellidos fueron cambiando y adaptándose. Por ejemplo, las terminaciones -ov, -ev o -in muestran el origen de la persona. Un apellido que termina en -ov o -ev a menudo indica que la persona viene de una familia de hombres.
Por otro lado, la terminación -in puede mostrar una conexión con un lugar. Estos pequeños cambios y adaptaciones han hecho que los apellidos rusos sean tan variados y ricos en historia.
En total en Rusia hay alrededor de 1,2 millones de apellidos diferentes.
El 67% de ellos se pueden considerar raros: los llevan no más de cuatro personas. Los demás apellidos se consideran comunes. Al mismo tiempo, el 13% de los rusos llevan apellidos del top-100. Para comparar: en Francia es el 8%, en América el 16%, y en China hasta el 85%.
¿De dónde provienen los apellidos más populares? Para responder a esta pregunta, los onomastas —así se llaman los especialistas en el estudio de los nombres propios— clasificaron por clusters los apellidos populares.
Calendarios — 44%. Los nombres a los hijos de campesinos se les daban según los santos días — el calendario ortodoxo. Más tarde de estos nombres surgían los apellidos. A menudo se elegía el nombre para el niño según el día más cercano de la memoria de un santo.
Esto explica por qué en Rusia hay tantos "Ivanov": el nombre Ioann se encuentra 274 veces en los santos días. Esto se debe a que no solo un Ioann específico, sino muchos personajes religiosos están incluidos en la lista de santos. La misma situación ocurre con los "Vasiliev" y los "Petrov": en el calendario eclesiástico hay alrededor de 120 Vasiliev y Petrov venerados.
Animales — 32%. Esta designación es muy condicional, aquí no solo entran los "Volkov" (Lobos), "Kozlov" (Cabras) y "Zaitsev" (Liebres). Los investigadores incluyen en este cluster apellidos relacionados con cualquier representante de la flora y fauna: surgidos de nombres de aves — "Vorobiev" (Gorrión), "Sorokin"; de peces — "Shchukin" (Lucio), "Karasiov" (Carpín); de insectos — "Komarov" (Mosquito); de plantas e incluso de sus partes — "Listiev" (Hojas), "Tsvetkov" (Flores).
Característicos — 10%. Estos apellidos están relacionados con algunas características del carácter o apariencia de la persona. Por ejemplo, los "Smirnov" pueden provenir de personas tranquilas y obedientes, los "Kudryavtsev" — de personas con cabellos rizados, los "Belov" — de personas de piel clara y rubias.
Los investigadores también relacionan la aparición de apellidos característicos con la migración de personas: así, probablemente surgieron los "Novikov", "Litvinov", "Cherkashin". "Cherkashin" es descendiente de un migrante de la orilla derecha de Ucrania o un cosaco del Dnieper, en la antigüedad tales personas eran llamadas cherkasy, cherkesy o cherkashy. "Litvinov" es descendiente de un habitante del Gran Ducado de Lituania.
Profesionales — 8%. A los campesinos que se dedicaban a la alfarería los llamaban "Goncharov", y a aquellos que forjaban hierro — "Kuznetsov" o "Kovalev", dependiendo de la región. Si en la familia había un herrero, toda la familia recibía el apellido "Kuznetsov".