Al principio, la frase ''Ivan tonto'' no tenía el mismo significado que tendría hoy en día, en el sentido moderno de la palabra. Durante mucho tiempo, nuestros ancestros tenían la tradición de llamar a los niños pequeños por nombres diferentes a los asignados para que sus almas no fueran secuestrados por los demonios
Hasta los 10 a 13 años, los infantes no tenían nombres reales, sino que se les llamaba por números (
números rusos), de acuerdo con el orden de su nacimiento: Primero (Первак), Segundo (Вторак), Tercero (Третьяк), etc.
Pero como en ese momento había muchos niños en las familias, los más pequeños se llamaban ''Los otros'' (Другаки) – (de las palabras «otros», «siguiente»).
Como resultado, el nombre se simplificó a «Tonto» («Дурак») y se convirtió en un nombre familiar, denotando al más joven de la familia. Este nombre se puede encontrar en documentos eclesiásticos hasta el siglo XV.
Y solo a partir del siglo XVII comenzó a adquirir un significado similar al moderno: «estúpido, irrazonable». Es bastante lógico, porque el más joven de la familia siempre ha sido inexperto y poco inteligente. Es por eso que el famoso Iván-tonto (Иван-дурак) nunca fue realmente un «tonto», sino que fue solo el hijo menor.