Lugares de Rusia que debes visitar

Sin duda alguna esta es una de las zonas más turísticas del mundo. Esta zona está formada por varios edificios religiosos y civiles. Hay diferentes catedrales, un museo y un gran palacio que se puede visitar. Todos estos edificios están rodeados por una enorme muralla roja, conocida como la Muralla del Kremlin. El lugar fue nombrado Kremlin ya que esta palabra define a una ciudadela fortificada. Para entender el porqué de esto, nos remontamos a la antigüedad, cuando las ciudades medievales rodeaban con una muralla los edificios más valiosos.

Kremlin fue abierto al público por primera vez en 1955, adquiriendo gran popularidad de inmediato. No fue hasta el año 1990 cuando este lugar fue reconocido como uno de los Patrimonios de la Humanidad de Rusia.

La Plaza Roja cuenta con una superficie de unos 23.100 metros cuadrados, siendo una de las zonas más famosas de la ciudad. Esta plaza se creó por Iván III para eliminar un conjunto de edificios de madera poco útiles que se encontraban en dicho sitio. A finales del siglo XV fueron removidos y se construyeron edificios de comercio en su lugar, cobrando importancia. Luego, se decidió reubicar a los comerciantes a otro lugar de la ciudad, dejando esos edificios sin mucha utilidad. No fue hasta el siglo XIX cuando esta plaza cobró vida de nuevo. Se establecieron nuevos comercios y se empezaron a hacer eventos sociales.

Actualmente es el lugar donde reside el presidente Vladimir Putin, y donde yace el sepulcro de Lenin y otros personajes relevantes en la historia de este país.

Este es un museo bastante especial, ya que se ubica en el centro de San Petersburgo, ocupando cinco edificios unidos. Se compone por un Hermitage Pequeño, Hermitage Viejo, Hermitage Nuevo, Palacio de Invierno y un Teatro de Hermitage. Cabe destacar las vistas de este museo, ya que se encuentra entre el río Neva y la Plaza del Palacio, por lo que no se va a quedar indiferente al visitar este lugar. El estilo empleado para crear este monumento fue barroco tardío, elaborado entre los años 1754 y 1762 por un arquitecto italiano bajo la orden de la emperatriz Isabel. Dicho museo guarda más de tres millones de objetos antiguos de Europa y Oriente, además de resguardar una de las pinacotecas más grandes del mundo.

En honor al trágico asesinato del zar Alejandro II de Rusia en este lugar, fue construida una iglesia también conocida como la Iglesia de la Resurrección de Cristo. Este nombre se potenció cuando, durante la Segunda Guerra Mundial, una bomba cayó sobre la cúpula más alta de esta iglesia. Sin embargo, en vez de explotar y destruir el edificio, no sucedió absolutamente nada y fue retirada por los obreros. El estilo con el que se diseñó esta iglesia fue ecléctico, algo que fue muy popular en la arquitectura de esos tiempos. Cabe destacar la detallada decoración de la parte inferior de la torre del campanario, ya que está compuesta por 134 mosaicos de escudos de armas de las provincias y pueblos rusos, los cuales hicieron donaciones para la construcción de la iglesia.

El Palacio Peterhof de Sant Petersburgo es considerado el más hermoso de toda la capital y cuenta con una magnífica ubicación, estando solo a 26 kilómetros del centro. Cuenta con 20 fuentes, 2 cascadas, unas 40 estatuas y otras impresionantes estructuras a su alrededor. Siendo un lugar tan prestigioso, no es sorprendente que fuera una residencia veraniega de Pedro I el Grande. El palacio contiene múltiples salas decoradas con cuadros de grandes artistas y mosaicos extravagantes. También destacan los grandes jardines que alberga este lugar, decorados con fuentes y estatuas. Aunque la propiedad sufrió varios ataques por parte de las tropas Nazis durante la Segunda Guerra Mundial, la mayor parte de los daños fueron restaurados.

Dicho sitio fue fundado en 1776 por el príncipe Piotr Ursúlov en colaboración con un empresario inglés llamado Michael Maddox. Es un edificio dedicado al teatro, la danza y la ópera, siendo uno de los lugares más turísticos de la capital rusa. En los principios de su inauguración, solo se mostraban obras rusas, sin embargo, a partir del año 1840 se comenzó a introducir obras de compositores extranjeros.

A pesar de haber sufrido grandes daños a causa de un terrible incendio en 1853, un arquitecto italiano llamado Alberto Cavos se comprometió con la restauración del mencionado teatro. El edificio abrió sus puertas al público tres años después del incendio, aunque en 2005 se volvería a cerrar debido a una inestabilidad notable de este. Finalmente, en 2011 la nueva restauración acabó y el teatro volvió a ser funcional.

Si te apetece viajar a un sitio soleado, al lado del mar y rodeado de montañas, este es un buen destino. Sochi es un sitio ideal para descansar en verano, sobre todo por sus hermosos paisajes Cáucasos como la costa de 147 kilómetros del Mar Negro. Aunque sea un lugar turístico, el ambiente es muy tranquilo y agradable. Se calcula que Sochi recibe aproximadamente cuatro millones de turistas al año, queriendo disfrutar de su clima veraniego.